Suicidios de sacerdotes: Tres casos en menos de un año

El intento de suicidio protagonizado por el sacerdote Luis Eugenio Silva en la noche del miércoles 11 sacudió a la Iglesia Católica. El obispo auxiliar del Arzobispado de Santiago, Cristián Contreras Villarroel, confirmó la noticia al día siguiente en medio de ante un amplio contingente de reporteros y la información fue el principal titular de la jornada.

El despliegue de prensa en torno al episodio no resulta extraño, en parte debido al mediático perfil del sacerdote Silva –comentarista de Canal 13, columnista de diarios, académico y ex secretario del cardenal Raúl Silva Henríquez-, pero también por la rareza de un intento de suicidio en la filas del clero católico, religión que rechaza la alternativa de la autoeliminación. No obstante, este es el tercer sacerdote que atenta contra su vida en menos de un año. Al caso de Silva, se suman los suicidios de los sacerdotes René Aguilera Colinier y Rimsky Rojas, quienes sí consumaron su propósito.

De acuerdo con la versión que desplegó La Tercera, citando fuentes que mantuvo bajo reserva, Silva intentó suicidarse tras recibir un llamado del arzobispo Ricardo Ezzati, quien le habría comunicado que “un canal de TV preparaba una investigación respecto de él”.

La Tercera no aclara si aquella supuesta investigación se refiere a abusos sexuales, pero apunta a que se trataría de hechos acontecidos en los años 80. En todo caso, en su declaración el obispo Contreras indicó que las eventuales acusaciones contra Silva “son rumores” y que el arzobispado “no ha recibido denuncia al respecto”.

En los suicidios de Aguilera y Rojas sí hubo acusaciones de abusos sexuales a menores e inicialmente la Iglesia no lo hizo público. En el caso de Aguilera, el sacerdote de la diócesis de San Bernardo se colgó en la casa que ocupaba en la parroquia Santísima Trinidad el 9 de septiembre del año pasado. En la noche de ese día, según informó radio Cooperativa, el obispo Juan Ignacio González ofició una misa en su recuerdo en la que señaló:

– No comprendemos cómo un hombre como el padre René tomó esa resolución. Hay que dejar ese juicio a Dios. Hemos visto a la gente llorando y como obispo miro al cielo y digo: “Señor, no lo entiendo, pero tú sí”.

A la semana siguiente, Chilevisión reveló que Aguilera había sido objeto de una denuncia de abuso hecha por un alumno del colegio Teresiano San José, del que era capellán. Una investigación de CIPER confirmó que las autoridades de la diócesis estaban al tanto de la denuncia y que ya habían iniciado una investigación eclesiástica cuando el obispo González hizo el sermón en que aseguró no comprender ni entender las razones que motivaron el suicidio de Aguilera.

En el caso del religioso Rimsky Rojas, la congregación salesiana, a la cual pertenecía, informó de su deceso el 28 de febrero pasado en un comunicado, sin hacer referencia a la denuncia por abusos que lo afectaba. Sin embargo, el 1 de marzo radio Bio Bio confirmó que el religioso era investigado por la denuncia hecha por un ex alumno del colegio que los salesianos mantienen en Valdivia, donde Rojas trabajó entre 1985 y 1988.

La misma radio complementó la información el 3 de marzo, señalando que la congregación reconoció que estaba en conocimiento de la investigación dos meses antes del suicidio del religioso.