El costo de vivir en mi propia casa: un robo legal

Señor Director:

En 1980 compramos una parcela agrícola en Calera de Tango por UF 500 (hoy aprox. $19.000.000). En 1985, con subsidio estatal y crédito bancario, construimos nuestra casa por UF 1.000 (hoy aprox. $39.500.000), que pagamos durante 12 años.

Durante casi 20 años pagamos contribuciones acordes al uso agrícola. Sin embargo, en 2004 el SII reclasificó el terreno como habitacional, elevando abruptamente las contribuciones a UF 67,80 anuales (hoy aprox. $2.676.500) y cobrando retroactivamente tres años por UF 51,86 (hoy aprox. $2.048.424), lo que nos obligó a endeudarnos. Lo curioso es que para la Municipalidad el terreno sigue siendo agrícola.

Hoy pagamos UF 80,30 anuales (hoy aprox. $3.171.000), es decir, UF 6,70 mensuales (aprox. $264.250), solo por vivir en nuestra casa, construida con esfuerzo y cumpliendo la ley. ¿Es justo este trato para una familia común? Urge una revisión del sistema.