CARTAS: Buses de dos pisos y regiones

Señor director: Acabo de leer un reportaje acerca de diez buses de dos pisos (y de última tecnología, aunque eso no lo dice el reportaje), guardados en Santiago sin usar. Haberlos comprado al parecer fue un error, del cual se culpa al Ministerio de Transporte.

La realidad es completamente distinta. Me explico: soy una persona de región, y no he viajado a Santiago en bastante tiempo. Pero no es necesario vivir en Santiago ni ser autoridad de transporte para entender que cuando un vehículo supera una altura que podríamos llamar normal o máxima se lleva consigo postes de cableado.

Por acá contamos con la Ruta 160, una de las más caras en peajes y una de las más peligrosas e inútiles, ya que en la conurbación Concepción/San Pedro/Talcahuano la usan como calle, gracias al desorden urbano y falta de inversión en infraestructura vial. Esto, sin contar con las muertes que siguen sucediendo por un tren pésimamente implementado. La Ruta 160 iba a ser nuestra conexión con la conurbación, no una solución al desorden vial ni la falta de inversión.

Lamento mucho la forma de gobernanza de este gobierno y de anteriores, cuyo fin es mantener satisfechos a habitantes de grandes ciudades.